Buena

Podría decir que estoy triste, que todo me parece innecesario, que las cosas no son como me gustaría, que tampoco soy demasiado complicada…y estarme así frases enteras, intentando convencerme que no soy yo la que elige, sino que son las estrellas las que me eligen. Y una mierda, ni estrellas ni señales, que a veces las cosas que me pasan me las busco a conciencia, pero ya está, dejo de estar triste ahora, o bueno en unas horas, según se vaya viendo.

Lo que de verdad quería contar es que últimamente me estoy preguntando que cualidades definen a las buenas personas, y si ser buena persona te salva de las cosas malas. La conclusión, si se le puede llamar así, es que no hay buenas personas, así en general, sino que hay buenas personas comparadas con otras. Y para las cosas malas, es como la lotería a la inversa, puedes no tener papeletas y te toca. Es como en todo, podríamos definir las características esenciales de una buena persona, pero eso no la convierte en buena persona, porque faltan las circunstancias personales y temporales concretas. Porque podemos actuar de una determinada manera, pero ese comportamiento a veces será de buena persona y otras de mala (o no tan buena). El ejemplo típico es la sinceridad. Decir la verdad puede mitificarte o por el contrario destruir lo que piensan de ti los demás.

Todo este rollo viene, a que solo en pocas ocasiones pienso que de verdad soy una buena persona, me considero tan normal, que el calificativo de buena está reservado a persona con más altos valores o estandartes de bondad. Lo único que se es que no quiero ser mala, aunque a veces sea cruel o insensible.

Y cada uno le basta una mano para contar a la gente que es buena buena (de la de verdad).